En un pueblo aislado de Lanzarote, un grupo de enanos se rebelan contra las autoridades de la institución en que están interrnados. En una demostración de caos absoluto, sus actos destruyen todo lo que se les pone en su camino. En una película en la que Herzog se lanzó a un jardín de cactus al final del rodaje, encontramos una reflexión profunda sobre la naturaleza de la crueldad en la especie humana.